El Espíritu Santo es la tercera persona de la santísima trinidad que surge del amor al Hijo de parte del Padre.
La misión del Hijo y la del Espíritu son inseparables porque en la santísima trinidad indivisible, el Hijo y el Espíritu son distintos, pero inseparables.
Cuando Dios envía a su Hijo, envía también su Espíritu, que nos une a Cristo en la Fe, a fin de podamos, como hijos adoptivos, llamar a Dios "Padre".
El Espíritu es invisible, pero lo conocemos por medio de su acción, cuando nos revela el verbo y cuando obra en la Iglesia.
Los profetas fueron inspirados por el Espíritu Santo para hablar en nombre de Dios.
El Espíritu Santo llena de gracia y hace fecunda la virginidad de María, para dar a luz al Hijo de Dios encarnado.
Por medio de los Sacramentos, Cristo comunica su Espíritu a los miembros de su cuerpo y, la gracia de Dios, que da frutos de vida nueva.
El Espíritu Santo se representa con numerosos símbolos como por ejemplo: El agua viva, que brota del corazón traspasado de Cristo y sacia la sed de los bautizados; también se representa con fuego, porque el fuego cuando toca algo lo transforma, y la paloma, que baja sobre Cristo en su bautismo y permanece en Él.
Mario Polanco Santos
Seminario Menor de la Inmaculada Concepción de María.
Chetumal, Quintana Roo.
2009
Este es un Blogger cuyo objeto, sustancial, radica en compartir, dar a conocer algunas de las obras literarias de Mario Polanco Santos y otras de los autores de su afinidad. Puesto que la globalización, del mundo actual, y la tecnología nos han alcanzado; nadie puede, ipso facto, adoptar una actitud reacia ante el debate, la aportación personal (ideas, propuestas…) en el Internet y las múltiples redes sociales. “Tienes que amar la lectura para poder ser un buen escritor..." (Carlos Fuentes)
domingo, 30 de noviembre de 2014
sábado, 15 de noviembre de 2014
“La sociedad se auto-destruye y el Estado: un observador más”
“El primer deber de todo Estado, decía
Thomas Hobbes en su libro Leviatán de 1651, es: proteger la vida de sus
ciudadanos”
Esto por cuanto hace a, uno de los más
viles (despreciable) acontecimientos
sociales: El homicidio. Del que millones de personas están siendo víctimas. ¿Y
todo por qué, queridos, amigos? Una de las muchas respuestas a esta
interrogante es: Por la falta de eficacia, en muchas ocasiones, de las
políticas sociales para la prevención del delito. En efecto, estimo, que el
mencionado problema socio-político, es gravísimo y puede afectar el desarrollo
socioeconómico, sobremanera, del país.
¿Estamos haciendo lo correcto, nosotros los ciudadanos, al seguir tolerando las infamias del gobierno en materia de seguridad?
¿Hace falta gente más capaz, y con
gran espíritu de servicio, en las Instituciones de seguridad del Estado?
¿Qué nos toca hacer a nosotros, como
sociedad, en aras evitar la proliferación de esta masacre?
¿Debe el gobierno impulsar medidas de
prevención del delito como: talleres gratuitos de lectura, deporte, danza, arte
etc., con mayor prioridad e instrumentación entre sus gobernados?
Mario Polanco Santos.
6 de octubre de 2014
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